25/11/25

Estaciones de Servicio piden al Gobierno que elimine los ingresos brutos en su proyecto de reforma tributaria

El sector exige que la iniciativa elimine estos mecanismos de recaudación que consideran ilegales.


Los estacioneros reclaman que la reforma tributaria elimine las retenciones interjurisdiccionales

Las Estaciones de Servicio vienen advirtiendo desde hace años que la superposición y descontrol en la carga tributaria provincial se ha convertido en uno de los principales factores que afectan su rentabilidad. En distintas jurisdicciones, el denominado SIRCREB —el sistema de recaudación bancaria para adelantos de Ingresos Brutos— viene aplicando retenciones automáticas que, en muchos casos, no corresponden y terminan obligando a las estaciones a pagar impuestos en provincias donde ni siquiera operan.

Ese es el caso de Formosa, donde expendedores se encontraron con una situación insólita: Misiones les descuenta hasta el 2,45 por ciento de cada depósito bancario como si fueran contribuyentes locales, pese a que toda la actividad económica se realiza exclusivamente en Formosa y sin ningún vínculo productivo o comercial con el territorio misionero.

La industria de los combustibles advierte que sin reforma fiscal no habrá competitividad

Andrés Cavallari, CEO de Raízen Argentina, planteó que casi la mitad del precio de los combustibles está compuesto por impuestos y reclamó un rediseño integral y simplificador.

La situación fue expuesta a Surtidores por Ángel Luis Bigatti, presidente de la Cámara de Estaciones de Servicio de Formosa, quien trabaja bajo el régimen de consignación con YPF y advirtió que la retención “representa un golpe directo al corazón de la economía de cualquier Estación de Servicio”. Explicó que la deducción equivale al 2,45 por ciento de la comisión que reciben. “Significa la pérdida inmediata del 25 por ciento del ingreso bruto disponible para pagar sueldos, cargas sociales, impuestos, mantenimiento y funcionar con normalidad”, alertó.

El dirigente indicó que existen demandas judiciales en curso, pero “la Justicia no hace nada” y el problema se estanca. Como si fuera poco, la respuesta administrativa tampoco es sencilla: Misiones exige que el damnificado —aunque no tribute allí— presente un reclamo ante su Agencia Tributaria, que puede demorar hasta 180 días en contestar. Para entonces, los descuentos ya se acumularon y el daño económico está hecho. En su caso, su empresa llegó a tener hasta 70 millones de pesos de saldo a favor que no puede utilizar en la operatoria diaria.

“Lo que hace Misiones es ilegal, arbitrario y destruye el capital de trabajo de cualquier empresa. Estamos peor que esclavos, prisioneros de guerra de los delincuentes de la DGR misionera”, expresó con dureza.

Frente a esta situación, Bigatti lanzó una exhortación directa al Poder Ejecutivo Nacional: pidió que la reforma tributaria que prepara el Gobierno elimine estas retenciones interjurisdiccionales, ya que son consideradas abusivas, desreguladas y perjudiciales para las empresas que operan formalmente. “Es urgente prohibir que las provincias apliquen retenciones impositivas sobre cuentas radicadas en otras jurisdicciones. Estos mecanismos deben ser suprimidos para siempre”, sostuvo.

Revisión del régimen de Ingresos Brutos: ¿un respiro para las Estaciones de Servicio?

El Gobierno presiona a las provincias para que eliminen o, por lo menos, rebajen sus alícuotas. Los empresarios lo consideran “distorsivo”, por los efectos que impactan de manera negativa en los precios de bienes y servicios.

Para las Estaciones de Servicio, lo que está en juego no es sólo un conflicto de competencia fiscal entre provincias, sino la supervivencia de empresas que ya operan con márgenes mínimos y cargas crecientes. El entrevistado recalcó que el SIRCREB, tal como está implementado, termina transformando cada depósito bancario en una especie de embargo automático que mina la capacidad operativa y genera un problema estructural: capital inmovilizado, burocracia que no responde, juicios que no avanzan y una presión fiscal sin precedentes.

El caso vuelve a encender alarmas en un sector que espera que la próxima reforma tributaria traiga alivio y no más cargas. “Sin reglas claras y sin control sobre los mecanismos de cobro automático, se hace imposible trabajar y sostener el servicio que todos los ciudadanos necesitan”, concluyó el dirigente.

Fuente: Surtidores