
El gobernador de Buenos Aires, Axel Kicillof, decidió un aumento de tarifas de los colectivos de 10% en diciembre, adicional a la fórmula prevista de inflación más 2% de ajuste mensual, con la que la suba de los boletos trepará a casi 15%.
El incremento aplicará a partir del lunes 1 de diciembre a las 0 horas en todos los colectivos que circulan exclusivamente por el Gran Buenos Aires (GBA) y que no entran a la Ciudad. Son las líneas que van del 200 para arriba.
¿Paro de colectivos?
Con esta medida, la provincia de Buenos Aires busca aplacar un grave conflicto que se está gestando con las empresas de colectivos, que le piden al gobierno de Javier Milei una resolución similar, antes de que la situación desemboque en un paro de los trabajadores o lockout patronal.
Ante la complicada situación financiera de las compañías, las cámaras empresariales buscan que la Nación anticipen el pago de subsidios y reconozca el acuerdo firmado en paritarias con los choferes. De otra forma, desde la semana que viene se va a empezar a ver resentido el servicio de transporte público.
Las cinco cámaras de empresas que operan en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) le mandaron este viernes una carta al subsecretario de Transporte Automotor, José Manuel Urdiroz, y le recordaron que aún no cuentan con "las condiciones económicas para pagar la totalidad de los salarios el jueves 4 de diciembre, correspondientes a noviembre".
Para eso, exigen que se reconozca la paritaria firmada en julio con la Unión Tranviarios Automotor (UTA), que arroja un aumento salarial del 5% para los choferes y fue homologada por la Secretaría de Trabajo. Pero el Ministerio de Economía no lo incorporó en el cálculo de costos de los colectivos -la "tarifa técnica"-, por lo que los fondos no están garantizados ni con tarifas ni con subsidios.
Previamente, los dueños de los colectivos habían anticipado que podrían pagar los salarios de este mes en 2 cuotas y los aguinaldos hasta en 6 cuotas.
Los problemas de las empresas de colectivos llevan unos 10 años, cuando se empezaron a ajustar sus ingresos ante costos crecientes. Desde 2016 reciben 30% menos de dinero por cada pasaje.
El conflicto se intensificó a mediados de 2022, cuando se disparó la inflación. Y persiste pese a los aumentos de tarifas que dispuso este Gobierno a partir de 2024; el más reciente, de 10% este mes.
Según el Índice Bondi, que elabora la Asociación Argentina de Empresarios del Transporte Automotor (AAETA) -donde pesa Metropol, la segunda empresa más grande, detrás de DOTA-, la Secretaría de Transporte reconoce $ 265.779,1 millones por mes para operar el sistema, equivalentes a una "tarifa técnica" de $ 1.092,28, que se compone entre los boletos vendidos y las compensaciones estatales.
Sin embargo, los costos reales son de $ 351.910,05 millones mensuales o de $ 1.550,75 por pasajero, sin contar el Impuesto al Valor Agregado (IVA) de 10,5%.
La diferencia, de $ 86.130,94 millones por mes o $ 458,87 por boleto, se refleja en una pérdida de calidad del servicio, con menos frecuencias y renovación de los coches, que empeoran día a día su estado.
De acuerdo a los datos del Instituto Interdisciplinario de Economía Política (IIEP) de la UBA y el Conicet, el Gobierno nacional envió subsidios al sistema de colectivos por el equivalente a $ 707.119 millones actualizados por inflación en lo que va de 2025 hasta noviembre, un 40% menos que en el mismo período de 2024.
Fuente: Clarín

